Bodega Alta Vista

Bodega Alta Vista saltó de inmediato a la fama el año de su fundación: 1998, una cosecha húmeda y caliente que sólo los enólogos y propietarios de la casa, el bordelés Jean Michel Arcaut, junto a Michel Rolland, lograron embotellar en un gran vino. Así nació Alto 1998 y la leyenda de Alta Vista, una casa de savoir faire francés.

Adquirida luego por el conde Patrick D’Aulan y emplazada en Chacras de Coria, Luján de Cuyo, Bodega Alta Vista desarrolló con los años un ambicioso plan de viñedos en los que adquirieron algunos de los más reputados en Luján de Cuyo: Alizarine en Las Compuertas, por ejemplo, Themis en Valle de Uco, entre otros.

Inventores del Single Vineyard, marca que registraron y luego liberaron para el uso común, siempre que se respete la idea centra de un viñedo un vino, Bodega Alta Vista marcó la pauta de la elaboración de proyectos boutique por década y media.

Siguiendo la estela bordelesa establecida en la vendimia de 1998, los enólogos que formaron el estilo de la casa siempre buscaron el balance en la intensidad del terruño de Mendoza. Así, Alta Vista Premium fue uno de los vinos icónicos de la década de 2000, seguido Alta Vista Single Vineyard Alizarine como ejemplos perfectos. También las marcas Atemporal para espumosos tiene predicamento propio.

A la fecha, Bodega Alta Vista es una de las casas de culto para los consumidores argentinos.