Hasta hace pocos años, la mantequilla de maní era un producto foráneo que conocíamos por las películas. Algún personaje del cine o la tele llegaba a su casa y resolvía la cena con un sánguche de pan lactal, mermelada y una misteriosa pasta beige. Una combinación bastante alejada del paladar argentino, sencillamente porque uno de los ingredientes no nos era familiar.
Como decían los Les Luthiers, “Time is money, el tiempo es un maní”. Entonces, primero una aclaración: en esta nota vamos a usar ambas expresiones (pasta y mantequilla) de manera indistinta, porque en Argentina hay fans de ambos productos.
Sin embargo, tenés que saber que pasta de maní y mantequilla de maní no son lo mismo: la pasta está hecha únicamente con ese alimento, sin ninguna clase de agregados. La mantequilla, en cambio, puede tener grasas saturadas, azúcar, sodio y otros aditivos que son utilizados para mejorar la apariencia y la textura.
Del cine a tu mesa
Si bien se lo considera comúnmente un fruto seco porque así lo venden en las dietéticas, junto con nueces y almendras, en realidad el maní es una leguminosa, es decir una legumbre, como los garbanzos. Y ya sabemos que resulta ideal para picadas con cervecita, sí. Pero, como ahora veremos, también va super bien en preparaciones dulces.
De hecho, quizás una de las escenas más recordadas del cine de infancia por parte de la generación que tiene entre veintipico y cuarenta y pocos es la de Juego de Gemelas, esa película donde una pequeña Lindsay Lohan interpreta a dos hermanas idénticas, fanáticas de las galletitas Oreo untadas en pasta de maní.
El punto es que de tanto verla en pantalla, la mantequilla o pasta de maní empezó a despertar curiosidad y nuestro país se volvió el escenario perfecto para su desarrollo. ¿Por qué? Porque Argentina es el mayor productor de maní de la región y uno de los más importantes del mundo.
Y así fue como, además de ablandar la milanesa (Pappo dixit) también ablandamos el maní. Por eso, con ideas que van desde desayunos saludables hasta la pastelería más golosa, te contamos cómo se metió la pasta de maní en la heladera de los argentinos.
Maní para mí: crece el consumo de mantequilla en Argentina
Edoardo Fracanzani es el director ejecutivo de la Cámara del Maní de Argentina desde 2016. En diálogo con Vinomanos, reconoció que en los últimos cinco años detectaron un crecimiento del consumo de la mantequilla de maní en el país.
Si bien dijo no contar con cifras exactas de expansión de este producto, aseguró que en Argentina actualmente se consume más de un kilo de maní por habitante al año, en todas sus formas.
En la Cámara consideran que el crecimiento de la demanda de mantequilla entre los argentinos se debe a dos factores: a que en el país cada vez se le da más importancia a una alimentación saludable y al lanzamiento de una campaña desde la entidad llamada “Maní para mí”.
Esta iniciativa, que busca fomentar el consumo de maní en Argentina, presenta diversas recetas para usar la mantequilla de maní en desayunos, almuerzos, meriendas, cenas, snacks y postres. Podés probar la que más te guste desde su página de Instagram.
Superalimento: los beneficios de la pasta de maní
La pasta de maní es un producto saludable, que suele ser incorporado por deportistas a sus dietas. Es muy probable que te hayas cruzado alguna receta fit en redes sociales que la incluya. Pero, ¿sabés por qué es tan beneficiosa?
El maní es un alimento súper completo que aporta muchísimos nutrientes y sus propiedades le permiten ser incorporado en distintos tipos de dietas, como la keto, proteica, baja en sodio, vegana o libre de gluten, entre otras.
Según la Cámara Argentina del Maní, diversas investigaciones han demostrado que este producto, consumido en cantidades adecuadas, puede ser bueno para:
- reducir riesgos de enfermedades del corazón, porque contiene grasas saludables que bajan la presión sanguínea.
- disminuir las posibilidades de tener complicaciones por diabetes, porque mantiene estable el azúcar en sangre y mejora el colesterol.
- brindar saciedad y ayudar a controlar el peso, porque es fuente de proteína y fibra.
- incorporar micro y macronutrientes, vitaminas y minerales, porque aporta fibra, vitamina E, folato, hierro y zinc
- inhibir la formación de coágulos por su gran capacidad antioxidante, sobre todo si se consume el maní con la cáscara.
Vamos al super: mantequilla de maní en Argentina
En Argentina, la mantequilla de maní es un producto que promete. Después de algunos años en expansión, podemos decir que está en su mejor momento y cada vez es más fácil encontrarla en el supermercado. Hay decenas, literalmente, de marcas, tanto de pasta como de mantequilla, y con múltiples variedades.
Por ejemplo, la pasta o manteca de Maní King viene en tres opciones: sabor original, que es más bien cremosa; la natural, que es 100% maní sin aditivos; y una que tiene sabor chocolate, para los más golosos.
Otras marcas, como Le-fit, tienen también versiones con sabor a coco, vainilla, con canela, banana, dulce de leche y una propuesta cookies and cream, bien dulzona.
La marca de miel Aleluya, que se produce en las bonaerenses Sierras de Tandil, presentó recientemente la Honey Peanut, una combinación de dos productos nacionales y de calidad exportable: miel y pasta de maní.
Hace ya algunos años, Albertina y Jaime, los fundadores de Aleluya, comenzaron a probar distintas combinaciones para la miel que hoy son un éxito: mostaza, ketchup, barbacoa, nueces, chocolate (de Mamuschka) y hasta dulce de leche.
Y ahora le llegó el momento a la mantequilla de maní. “Partimos de la inquietud de una amiga de mi esposa que tiempo atrás había vivido en Sudáfrica y nos contó que allá era muy común saborear esa combinación”, recuerda Adrián Molina, director de Aleluya.
Y dice que “encontrar la pasta tostada de maní y combinarla con la miel nos llevó un par de años. Pero logramos un producto único, que será ícono para la marca y la categoría incipiente”.
Entre sus ventajas, la mantequilla de maní con miel es una gran opción para un desayuno saludable porque aporta energía para todo el día.
Pastelería argentina con mantequilla de maní: dónde la encuentro
El supermercado no es el único lugar donde podés conseguir mantequilla de maní. Además de los frascos, esta pasta ha encontrado su espacio natural en los dulces y la pastelería argentina.
Jamás nos atreveríamos a decir que este producto está reemplazando al dulce de leche, pero sin dudas se presenta como una alternativa para quienes se empalagan fácilmente.
Damián Betular es una de las personas que ha sabido entender eso. Su cookie de maní y caramelo lleva chocolate, pasta de maní, caramelo salado, ganache de chocolate y maní garrapiñado. Es una bomba y podés encontrarla en Betular Patisserie, en el barrio de Devoto.
En Oli Café, hace un tiempo, sentían que faltaba una opción en el menú del desayuno que fuera dulce, pero a la vez saludable.
Por eso idearon el Bowl nutritivo de coco, que lleva una crema a base de esta fruta, similar a la pastelera y firme como yogur. A eso se le agregan frutos rojos, garrapiñada de castañas de cajú, pistacho y semillas de girasol. Y obviamente, mantequilla de maní. Es apta para veganos y libre de gluten.
En las sucursales de Cofi Jaus vas a poder encontrar el Licuado Prote, que lleva proteína sabor vainilla, mantequilla de maní, banana y leche descremada. Así que si saliste de entrenar por la zona de Palermo, Vicente López, Nuñez, Belgrano o Villa Urquiza, podés pasar a recuperar energía.
La famosa churrería de la costa argentina El Topo lleva años en expansión, conquistando los barrios porteños y lanzando a su paso nuevos sabores. Sin miedo al qué dirán, han presentado churros rellenos de aceitunas, leberwurst, crema de limón, hummus, roquefort, jamón y queso, frambuesa y -por supuesto- mantequilla de maní.
La mantequilla de maní ha llegado incluso hasta los helados, como las paletas de Lucciano’s, que combinan esta pasta con caramelo, chocolate y pedacitos de maní. O los bomboncitos de Goodsten, en una versión con helado de “peanut butter”, centro de salsa de caramelo cubierto con chocolate y maní tostado.
La mantequilla de maní y un mundo de combinaciones
Como dijimos antes, a pesar de que Argentina es un país donde se produce maní en cantidades, en Estados Unidos se nos han adelantado a explorar sus bondades. Y han sabido aprovechar la ventaja para mezclar la mantequilla de maní con opciones que nosotros todavía no alcanzamos a imaginar, pero que podemos imitar.
Por ejemplo, si recorrés un supermercado en USA en la góndola podés encontrar la marca Goober, que mezcla pasta de maní con mermelada de uva o frutilla. O sea, hacés el sandwich de las películas con un solo frasco.
Earth Balance tiene una versión de mantequilla con aceite de lino, que ofrece muchos beneficios para la salud y combina muy bien con apio, galletas saladas o rodajas de fruta.
Además, los Reese’s son chocolates famosos por su relleno de mantequilla de maní, que equilibra a la perfección la sal de la legumbre con el dulzor del chocolate.
Ahora también lanzaron un café helado, que se vende en caja listo para tomar, con leche y la cremosidad de la pasta de maní.
Y si de café se trata, también se venden unas cápsulas para cafetera con mantequilla de maní y chocolate.
Los famosos confites M&M tampoco se quedaron atrás y recientemente llegaron a las tiendas con una versión rellena con… ¿adivinás? Sí, mantequilla de maní.
El tiempo (la heladera, la alacena, la góndola del super, la pantalla del cine, todo) es un maní.