En el país de los tintos el blanco es tuerto. Así podría rezar el refrán, pero la realidad indica todo lo contrario: mientras que los números de consumo de tintos están algo estancados, el de los blancos acusa cierto campo en verde. Cifras hay pocas. Pero en la medida en que uno habla con bodegas, con restaurantes y con vinotecas existe una sensación de ruido blanco.
Es como si de pronto los consumidores hubieran recordado que, para una picada, para unos fideos con pesto, unas bruschettas o un omelette o una ensalada, los blancos son la mejor opción.
Pero seamos honestos en el razonamiento: no es sólo un descubrimiento tardío de los bebedores de vinos, es que la oferta cambió dramáticamente respecto del pasado reciente.
Buena parte de esa reinvención se debe a la lógica del mercado. Ante una oferta monotinta durante al menos dos décadas, las bodegas encontraron una forma de diferenciarse explorando un sendero blanco.
Para que eso fuese posible, hay que decir, fue necesario que nuevos viñedos de altura entraran en producción (al menos en Mendoza) y que viejos viñedos de otras zonas alcanzaran cierta maestría técnica en su ejecución.
Así las cosas, empujada por un lado o realizada por el otro, hoy despunta una vanguardia de blancos en el país que son de estándar mundial.
Es verdad, los precios de esa vanguardia son tan elevados como exclusivos. Sin embargo, y sin abonar directamente la teoría del derrame, en este caso se empieza a cumplir para las gamas medias. Si sumamos mejores técnicas, mejores viñas y una demanda creciente, la cuenta no puede fallar.
Ahora bien, en plan de conocer alguno de esos pináculos de la nueva oferta blanca, conviene apuntarse con alguno de estos vinos que listamos a continuación.
Estos son los mejores blancos que hay en la Argentina
- Adrianna Vineyard White Bones Chardonnay 2021
- Zuccardi Fósil 2022
- Riccitelli Chardonnay 2019
- Chacra Mainque Chardonnay 2020
- La Linterna El Tomillo Parcela 1 Chardonnay 2021
- Cobos Chardonnay Zingaretti 2021
- Teho Semillón 2021
- Salentein Las Sequoias Single Vineyard Chardonnay 2021
- Susana Balbo Blanco Limited Edition Gualtallary 2021
- Zorzal La Reina Semillón 2021
Con la añada 2012 este vino se consagró como una punta de lanza de la movida de los nuevos blancos. Elaborada con uvas de Gualtallary, Valle de Uco, esta añada tiene una nota lupulada y con hierbas de campo, y un paladar vibrante y cremoso, de tiza, lleno de sabor.
El primero de la zaga fue la añada 2016. Con uvas de San Pablo, Valle de Uco, ofrece un perfil nítido y a la vez poco frutal, con notas de huacatay, hierbas y lima, más un paladar de tiza y textura muy fina.
Con uvas de Gualtallary y La Carrera, en Valle de Uco, el enólogo Matías Riccitelli propone un blanco de altura, con aromas de lima, cedrón y huacatay, antesala de una boca delicada y llena de energía.
Emplea uvas de Río Negro para ofrecer un blanco nítido, delicado y floral, donde el paladar queda lleno y a la vez etéreo. La magia está en los detalles y en la frescura elevada que consigue.
Con un recorte pedregoso de Gualtallary, Valle de Uco, Bemberg propone un blanco concentrado, en el que se agita un corazón vibrante. Riqueza y matices, que van de las hierbas a la fruta blanca.
La crianza y la uva conviven en un logrado equilibrio en este blanco de Villa Bastías, Valle de Uco. Concentrado y con matices, propone un paladar de riqueza y nervio, con largo recuerdo donde la fruta y la madera se lucen por igual.
Se elabora con uvas de Paraje Altamira, Valle de Uco, y propone un estilo cremoso, untuoso y de paso envolvente sin resignar la agilidad de boca. Para descubrir un blanco que recuerda a miel y manzanilla.
Un pequeño viñedo en San Pablo, Valle de Uco, donde hay dos sequoias, da el marco para este blanco delicado, donde las notas de lima y acacia coronan una boca envolvente y ágil al mismo tiempo.
Es un Torrontés de altura que, criado en barricas, ofrece notas de vermuth, de albahaca y de curry, que definen un nuevo paradigma para la variedad. En boca es vibrante, con una nota de tiza.
Se elabora con uvas de un viejo viñedo en Tupungato, Valle de Uco, y ofrece una larga crianza que no opaca al vino. Al contrario, le suma matices y una textura cremosa en boca que subraya el volumen y vibrancia de la variedad.
Foto de portada: Foto de Thomas Martinsen en Unsplash