La trama jazzera de Buenos Aires refresca oídos y paladares con propuestas de vinos poco tradicionales. Recorrimos para vos las noches sensoriales porteñas, de la mano de músicos jóvenes y copas bien afinadas. Acá, nuestra guía para cerrar los ojos y paladear con placer.

lugares de jazz en Buenos AiresLos mejores lugares de jazz en Buenos Aires

Las Patriotas Vilardo: jazz y promesas de funk

La historia es simple: el restaurant Las Patriotas y la tienda de vinos Club Vilardo maridaron y de allí salió Las Patriotas Vilardo. Felipe “Pipe” Colloca, uno de los dueños del emprendimiento palermitano, cuenta que el foco está en los vinos naturales de baja intervención. “Buscamos productores que reflejen el terroir en la botella. Queremos etiquetas lejos de la estandarización y del laboratorio”, explica.

Cambiaron la carta, dejaron de lado las comidas criollas y ofrecen platitos como de bar. La coctelería está a cargo de Frank Sosa, quien reinterpreta tragos clásicos incorporando vino. Pipe ejemplifica: “El Aperol spritz lo hace con un Pét Nat de Pinot Noir y el NY Sour lo termina con un nebbiolo de Cara Sucia, de Durigutti. La carta de tragos va variando constantemente, así como la oferta de whiskies, piscos y aguardientes”.

Carta jazzera. En el menú hay tapeos y platitos, como hummus con pan de masa madre; un tiradito de pescado, arepas, empanadas de copetín fritas y queso y dulce basado en queso azul y dulce de cayota. La carta va cambiando cada dos meses de acuerdo a los productos de estación.

Alma accesible. “Hay pocos lugares de jazz en Buenos Aires donde no te cobren derecho a espectáculo ni consumición obligatoria. Nuestro ciclo se llama Jazzito y se da los días martes. Queremos bajarlo de cierto pedestal, que sea accesible a todos. Nos contactamos con el multi instrumentista y productor Gianluca Bonfanti. Tiene una banda amiga de la casa llamada Los Mangrulleros, y está a cargo de la curaduría del local. También suele formar parte de quienes tocan. Es una propuesta versátil y moderna. Para este año tenemos la intención de hacer un ciclo aparte con una banda estable de funk”, anticipa Colloca.

lugares de jazz en Buenos AiresVidriera musical y vinos de baja intervención

Originalmente Ser y Tiempo se gestó como un wine bar. Agustín Iuri, uno de los dueños, detalla el perfil: “A través de vinos no tan conocidos y bodegas chicas, buscamos una propia opinión acerca del sabor. Queremos no estar condicionados por las cuestiones comerciales y de marketing que estandarizan a la industria. Nos interesa la baja intervención: que el producto sea lo más natural posible. Trabajamos con elaboradores pequeños y nos gusta describir lo que ofrecemos a cada consumidor”.

Inspiración. Su filosofía de disfrute incluye el jazz, música ideal a su juicio para acompañar el relax. “Pensé este lugar a partir de un momento que yo tenía cotidianamente, es decir, abrir un vino a tal hora, poner jazz y buscar una forma relajada de terminar el día. Esta ecuación cierra con el jazz en vivo: cada componente tiene un rol claro y no es un grupo o un cantante con una banda atrás. Los instrumentos acústicos acompañan bien este momento”, afirma. En cuanto a la carta, Iuri hace hincapié en el equipo, ya consolidado, y en los ingredientes “agroecológicos, orgánicos y de estación”.

Programación. Uno de los lugares de jazz en Buenos Aires más comprometidos, Ser y Tiempo abre de miércoles a sábados de 19 a 1 am. “Cada día está organizado por un referente, como Ramiro Franceschin o Gabriel Eisenchlas, quienes mantienen el contacto con los músicos. Queremos que haya aleatoriedad, constante movimiento. A muchos jóvenes les sirve para foguearse en el vivo, y tuvimos la suerte de haber tenido grandes músicos acá, como el trompetista Enrique Norris”, recuerda Iuri.

lugares de jazz en Buenos AiresBebop, con los ojos en New York

No podemos hablar de lugares de jazz en Buenos Aires sin mencionar a Bebop, que, desde hace varios años, suena fuerte como club al estilo NY, primero en San Telmo y más recientemente, en Palermo. Grandes nombres del jazz y géneros afines se apalancan en los vinos y la coctelería cuidada que el consagrado sommelier Aldo Graziani digita. “Tenemos una selección de pequeños productores que vamos modificando, con unas 40 o 50 etiquetas”, asegura.

Cocktails clásicos con vino. “Es un sello nuestro el vino como protagonista. Las reversiones son tendencia, así como el florecimiento del vermouth. Suceden cosas nuevas: en los shows -advierte Graziani- la gente toma vino, cuando hace 20 años era el espacio de la cerveza”.

Ciclo de blues Manos Negras. “Los miércoles son del blues, y Manos Negras es una bodega muy aliada a nuestra propuesta, así que se suma con tragos con vino y happy hour de sus etiquetas”.

Los músicos internacionales saben. Muchos de los músicos que tocan en Bebop se conocen y se pasan el dato. “Lo elogian permanentemente. Nuestra directora artística es Karina Nisinman, y hace esto posible. Estamos súper contentos: hacemos más de 50 shows por mes. Los domingos sumamos Jazz & Lunch, una tradición de los clubes de jazz de NY y del mundo. Los artistas internacionales son clave: pasaron Rosa Passos, Scott Henderson, Antonio Hart y Russell Malone, ente muchos otros”, sonríe el sommelier.

lugares de jazz en Buenos AiresAquí mandan Las Divines

¿Un restaurant y una vinoteca especializada en vinos naturales y orgánicos con sesiones de jazz? Funciona. El último (pero no menos importante) en este top 4 de lugares de jazz en Buenos Aires se llama Las Divines, y los vinos son de Envero. Vicky Vautier, una de sus dueñas, explica que cada una de las etiquetas fue especialmente seleccionada por el sommelier del lugar, Juan Tula.

“A su vez, contamos con 14 etiquetas propias, elaboradas por la Bodega Cecchin, en Mendoza. La carta cuenta con tapas, tablas, platos principales y postres, con carne, pescado, pastas y variadas opciones vegetarianas, veganas y gluten free. La cocina está a cargo de Nelson Gómez y Sofía García”, destaca.

Mercado de abasto. Este emprendimiento familiar remite a un pequeño mercado de abasto, con carnicería, almacén y verdulería de los años ´40. También tiene una épica setentosa, con azulejos de un taller mecánico, y toques modernos, como por ejemplo el Mural del Nacimiento de la Vid, diseñado por la artista Josefina Di Nucci.

Club de vino. “Arrancamos con un día a la semana de música en vivo, y luego fuimos sumando más. Los jueves tenemos un ciclo de jazz a cargo de Nahuel Fernández, que trae siempre músicos distintos. Generalmente es sin entrada, solo se tiene que consumir en el restaurant”, remarca. La oferta incluye un Club del Vino, catas dirigidas todos los miércoles, catas privadas, noches de Tarot y noches de astrología.

GPS
1- Las Patriotas Vilardo, Paunero 2880.
2- Ser y Tiempo, Gorriti 5910.
3- Bebop Club, Uriarte 1658.
4- Las Divines, Aráoz 1392.