En Tupungato, Valle de Uco, sobre la ruta 89 nació un proyecto con un propósito ambicioso y una conexión única con la naturaleza. 3SAPAS, acrónimo de «tres suizos al pie de los Andes», es la materialización del sueño de los hermanos Arnaud y Florian Frésad, acompañados por su entrañable perro, Gibbs. Lo que comenzó como un anhelo de negocio vitivinícola, pronto se convirtió en una apuesta por la sostenibilidad.
Joven, irreverente y comprometida
Este proyecto, que busca encarnar la esencia de la amistad, la familia y el amor por la tierra, ha sumado nuevos miembros clave a su corazón vinícola. En mayo de este año, Jonás Lépine, amigo cercano de los Frésad, se unió para liderar las áreas comerciales y de marketing.
En el aspecto técnico, el equipo cuenta con el ingeniero agrónomo y enólogo Luis Coita Civit, así como el enólogo Fernando Sota, ambos con una vasta experiencia en reconocidas bodegas nacionales y de Europa.
El objetivo de 3SAPAS es claro: ser una bodega que represente a su generación, aportando aires frescos al mundo del vino. Su identidad se define como joven, irreverente y, sobre todo, comprometida con el planeta.

Para los fundadores, la misión va más allá de producir buenos vinos: buscan convertir la bebida en una expresión de vida y conexión humana.
El compromiso ambiental se manifiesta en cada paso del proceso de producción. Desde el tratamiento de los viñedos hasta la elección de materiales ecológicos para las etiquetas y corchos biodegradables, la bodega se esfuerza por ser orgánica en todos los aspectos.
Y no solo eso, ha replantado olivares centenarios que eran de Medrano y parte de un ex viñedo que iba a convertirse en un barrio cerrado, buscando darles una nueva oportunidad.
Aunque inicialmente aspiraban a ser carbono neutrales, la ambición de 3SAPAS los llevó a dar un paso más: apuntan a ser carbono negativos en el futuro.

3SAPAS y su programa “Una botella=un árbol”
Este objetivo se refleja en su asociación con la ONG Un Árbol a través del programa «Una botella=un árbol». Por cada botella vendida, 3SAPAS se compromete a plantar un árbol nativo en zonas amenazadas por la deforestación.
Esta iniciativa no solo busca compensar las emisiones, sino anularlas, llegando a plantar más de 1.000 árboles por cada lote de vides.
La construcción de la bodega (hoy vinifican con terceros) está en marcha con un diseño que respeta los lineamientos modernos y naturales de la arquitectura local.

La sostenibilidad es una prioridad, con planes para generar su propia energía fotovoltaica y convertirse en productores con una operación completamente sustentable.
Las etiquetas de los vinos, diseñadas para celebrar la naturaleza, destacan animales en peligro de extinción de la fauna local argentina. Además, cuentan con un código QR en donde se pueden ver los avances del programa «Una botella=un árbol».
La propuesta disruptiva y única de 3SAPAS se extiende a su canal de comercialización, que incluye una tienda de e-commerce propia, distribuidoras, vinotecas y restaurantes en todo el país.

Con uvas provenientes del Alto Agrelo y Tupungato, se destaca el Malbec Reserva 2022 con un paso de 8 meses de crianza en barricas de roble, como también el blend Icono Rey Del Aire 2022, con Malbec, Merlot y un toque de Chenin Blanc que homenajea al cóndor.
Además, su Malbec Rosé 2023 tiene un perfil de cerezas y flores que lo hacen muy atractivo.
En palabras de los fundadores, 3SAPAS asume el compromiso de generar riqueza respetando y preservando el ecosistema, al entender que la verdadera sustentabilidad económica va de la mano con la responsabilidad ambiental.
Así, con cada botella de 3SAPAS no solo se disfruta de un rico vino, sino que se contribuye a un proyecto que transforma esa bebida en vida, y finalmente a la vida en un compromiso tangible con el planeta.
