Una ola llegó a Villa Ortúzar y le lavó la cara a la parte de la porteña Avenida Álvarez Thomas donde solo reinaban las parrillas. Kandui Bar, que tuvo su bautismo de agua en agosto pasado, ofrece desde un relajado espacio para compartir unas cervezas con una picada, trabajar mientras se disfruta de alguna de las especialidades de la cafetería o comer una hamburguesa veggie después de haber trajinado la pista de surfskate que está al fondo del local.

Todo está bañado por una atmósfera playera sin estridencias: una tabla de surf verde decora una de las paredes laterales de ingreso, los centros de mesas son vasos con arena, hay caracoles marinos y mucha madera a la vista.

Kandui BarMientras miro las nuevas olas

Un grupo de surfers tenía en Miramar su base de operaciones y organizaba viajes desde la ciudad de Buenos Aires para ofrecer clases de ese deporte en el balneario, más alojamiento, desayuno y cena.

Cada año se sumaban más interesados. Como la mayoría de los visitantes eran porteños, decidieron crear un centro de entrenamiento en Villa Crespo, específicamente diseñado para domar las olas sobre tablas.

A esa marea que crecía se sumó Lautaro Catalano, quien había sido integrante de los viajes a Miramar. Durante la pandemia, se reunían en los Lagos de Palermo y compartían cervezas y pizzas. “Tenemos el centro de entrenamiento, viene mucha gente acá… ¿Por qué no juntamos todo en un solo lugar?”, se preguntaron él, Bernardo, Nicolás, Fernando y Ezequiel, el quinteto fundador.

Lautaro había tenido una hamburguesería y deseaba retomar una aventura gastronómica. Unieron fuerzas y pensaron un lugar que albergase el centro de entrenamiento, pero también un bar/restorán, una pista de surfskate para practicar los movimientos que se hacen en el mar, consultorios y una tienda.

Un viejo salón de fiestas con fachada de castillo medieval fue el espacio elegido para fundar “The Surf House”, el nombre del megaproyecto. Y el local propiamente gastronómico fue bautizado como Kandui Bar, una famosa ola de Indonesia, quizá la más fuerte y desafiante para los deportistas.

Kandui Bar es una cafetería de día y bar de noche, es difícil de conceptualizar. Es como un buffet de un club, pero un buffet 2.0. La atmósfera de calidez que se genera en los viajes es lo que queremos trasladar acá”, dice Lautaro, mientras pasan hacia el fondo quienes van a usar la pista, tanto en su modalidad surfskate como skate clásico.

Kandui BarKandui Bar: un menú para que se te haga agua la boca

Hay cafés de especialidad, calientes y fríos. Lucas Battipede (23 años, estudiante de Gestión Hotelera), encargado de la barra durante la mañana y las primeras horas de la tarde, cuenta: “Uno de los cafés de autor es el Kanduccino, un capuchino con cacao en la base y artelatte con salsa de chocolate”.

También ofrecen limonadas, pepiranja (jugo de naranja, pepino y almíbar de jengibre), pepinada (limonada, pepino, menta y almíbar de jengibre), y pomeladas (jugo de pomelo, albahaca y el famoso almíbar).

“Tenemos un trago, Expreso Kandui, que tiene agua tónica, un cítrico (lima, limón o naranja), dos shots de café, media onza de Martini y un poco de almíbar de jengibre; la mezcla es muy refrescante”, revela Lucas.

La onda de buffet 2.0 se palpa y se escucha en la calidez con la que se saludan los habitués, la mayoría de entre 25 y 35 años. Algunos van a la pista de surfskate, otros suben al gimnasio que está en el primer piso y están los que preguntan por ropa o tablas. Podría ser un club donde se combinan relax y adrenalina al mismo tiempo.

Verónica Vega (38 años, 13 de experiencia en el rubro gastronómico) es la encargada de cocina. “La estrella del lugar es la ensalada Kandui, que tiene una vinagreta de maní, kale, garbanzos y croquetas de lenteja, palta, repollo, zanahoria, cebolla encurtida y cabutia al horno”, detalla.

Kandui BarHay también ensaladas César y de atún, y si deseás sumergirte en el mundo del pan, hay sandwiches de milanesa con pan brioche, de pollo crispy, de bondiola braseada con coleslaw y hamburguesas veggie.

“Tenemos bastones de muzzarella con polenta, es algo muy casero. Me gusta eso. Y el desayuno Up, que tiene queso crema, huevos revueltos, palta, tomate, y que algunos usan de almuerzo”, dice Verónica.

Mientras tachás los días en el almanaque para irte al mar, un barrio de la ciudad junto al río te espera con sensación de playa, olas y tablas.

GPS

Kandui Bar de Surf
Av. Álvarez Thomas 1651, CABA.
@kandui.ba
De lunes a sábado de 9 a 24.

Es redactor freelance en Ñ y editor de la revista Tercer Sector. Además, coordina la Licenciatura en Comunicación Social de la Universidad Nacional de Moreno, donde da clases en la asignatura Taller de Práctica Preprofesional. En la UBA dicta la materia Diseño de la Información Periodística, en la carrera de Ciencias de la Comunicación, de la que es graduado. Escribió notas para Página/12, Todo es Historia, Caras y Caretas, Brando y Miradas al Sur, y trabajó como productor de radio y tv. En 2015 publicó el libro "Fuera de juego. Crónicas sociales en la frontera del rugby". También se desempeñó en el área de comunicación institucional del mundo editorial. Prefiere el Malbec.