Desarmadero Bar parece haber estado siempre en la esquina de Lavalleja y Gorriti, como esos clásicos con una chapa de bronce. Sin embargo no tiene más de 2 años de vida. Se inauguró el 25 de mayo de 2017 con el lema Cerveza + Arte, cuando la ola de la cerveza artesanal ya estaba en su apogeo.
Así y todo, hoy Desarmadero Bar es uno de los referentes para los seguidores de la cerveza artesanal en Buenos Aires. Los mejores fabricantes, algunos de ellos figuritas difíciles recelosos de su producto, les dan para la venta sus mejores barriles. Y el público acompaña con expectativa. ¿Cómo lograron hacerse un lugar de reconocimiento en tan poco tiempo? La respuesta corta: calidad.
“Cuando empezamos esto era un lugar bastante más precario, pero fuimos reinvirtiendo todo – cuenta Eduardo Perez, que junto a Carolina Ochoa y Diego Ibargaray hacen el trío societario del bar. “Empezamos teniendo solo 13 canillas. Hoy son 28”. Dieron las mejoras paso a paso. “Un día vino Albertito (Alberto Rodríguez de Itzel) y nos dijo que el sistema de refrigeración no andaba bien… al otro día cambiamos todo”.
La gran novedad por estos días es que al local original, inconfundible su puerta intervenida por el artista Alfredo Segatori con pedazos de metalurgia reciclada, se va a sumar el espacio ubicado exactamente enfrente. Los Desarmadero Bar están en plena obra. Y esta vez el encargado de darle continuidad al eje arte + arte es el reconocido muralista Martín Ron. “Ahí vamos a tener otras 12 o 13 canillas, con algunas cervezas conocidas y otras que serán rarezas”. Seguramente serán lujos que otros pocos se puedan dar.
En cuanto a lo gastronómico, Perez me adelanta que el Desarmadero Bar de Martín Ron o “de enfrente” (para llamarlo de alguna manera) va a tener una marcada orientación a la carne en sandwich. Pero no hay mucha otra data.
En la corta y vertiginosa historia de Desarmadero Bar sus socios tomaron algunas decisiones un tanto drásticas que nos dan señales del estilo que le quieren dar al lugar en cuanto a la colección de cerezas que ofrecen.
“Por ejemplo – dice Perez – dejamos de ofrecer Golden. Y fuimos de los primeros en servir una sour”. También fueron fundacionales en la transición que está llevando a los bares a usar la copa para servir algunos estilos especiales de cerveza. “A la gente le gusta, para algunos estilos es mejor, más delicada que la pinta tradicional”.
Hoy (sin contar el nuevo local) Desarmadero Bar tiene capacidad para unas 85 personas en salón, 50 en vereda y 60 en terraza. Adentro el lugar tiene otros murales de Segatori y el toque en la decoración de la artista Paula Pons. Un golazo es la comodidad de las sillas tolix. La terraza es obligada en verano pero también tiene un cerramiento para los días invernales.
En las 28 canillas podés encontrar cervezas de Juguetes Perdidos, Minga, Itzel, Strange Brewing, Sir Hopper, Kraken, Gorilla, Waracha, Bierhaus, Cheverry, Lindenberg, entre otros. Sirven crowlers en el momento.
En la carta hay Tapas Calientes, Despensa, Sándwiches y Papas (opciones Sin TACC). Probamos y son muy recomendables las empanadas caseras en sus tres versiones: pollo al curry, hongos y queso, y osobuco al malbec.
Hay otras opciones clásicas, como tortilla española con pan de campo, rabas con mayonesa cítrica. En la sección Despensa hay tablas acompañadas de pan de campo, como jamón crudo y tomates asados o tabla de quesos con pasta de aceitunas. Los sándwiches son artesanales, de buena textura, sabrosos. La Burger Desarmadero con roast beef, cheddar, panceta, cebolla crocante, lechuga, tomate y salsa barbacoa. El Sándwich de Pastrami, la Veggie Burger, un Sándwich de Milanesa y otro de Bondiola braseada.
Las papas rotas con doble cocción y bien condimentadas –crocantes por fuera y tiernas por dentro- son también una buena opción.
Dirección: Gorriti 4295, Palermo – CABA
Días y horarios de apertura: lunes de 18 a 2 am, martes de 18 a 1 am, miércoles y jueves de 18 a 2 am, viernes de 18 a 3 am, sábado de 13 a 3 am y domingos de 13 a 1 am.
Happy Hour: desde la apertura hasta las 20:30 hs
