IPAs

La rebelión de las IPAs argentinas: 7 cervezas para conocer el estilo de moda

Si te gusta la cerveza artesanal lupulada y amarga te recomendamos algunas de las mejores IPAs argentinas. Cómo son, quiénes las hacen y dónde se consiguen.

Cerveza, Recomendados

Cerveza

En las pizarras de los bares cerveceros las IPAs ocupan cada vez más lugar. No era así hace dos o tres años. La razón detrás de este ascenso de un estilo aromático y amargo es múltiple, aunque reconoce un vector claro: para un cervecero artesanal la IPA es un desafío especial porque la intensidad y la facilidad de paladar no siempre van de la mano. Y la historia de las IPAs Argentinas es la que va desde el amor cervecero al amor de los bebedores que ahora la descubren y la elevan al estilo de moda.

Tanto, que para los bares locales hoy representa la mitad o más de sus ventas.

IPA es una bandera para la cerveza artesanal, el estilo cargado de lúpulo que los cerveceros abrazaron para diferenciarse de la cerveza industrial (que incluso hoy las produce). Y es la que los consumidores eligieron para atravesar la frontera de los estilos clásicos más suaves y se animan a probar estilos más complejos, donde la IPA lleva la voz cantante.

Ahora bien, ¿qué son y qué distingue a las IPAs de otros estilos de cerveza?

ABC IPAs

Lo que llamamos IPA era una ale pálida que a principios de 1800, para sobrevivir el viaje de Inglaterra a India, se hacía con mucho lúpulo, cuyos efectos antibióticos le daban estabilidad. De hecho, el nombre explica buena parte de esta historia: India Pale Ale, que decantó en IPA a secas. Pero en Europa la popularidad del estilo declinó hasta prácticamente desaparecer a mediados del siglo XX. Recién fue redescubierto en Estados Unidos, hacia 1970, ya en la era de la cerveza artesanal moderna.

Con esa envidiable voluntad por llevar las cosas al límite, y presionados por satisfacer a los aficionados al lúpulo, los americanos crearon la IPA Americana, una interpretación moderna del estilo histórico inglés elaborada con ingredientes y actitud yankees: bastante menos carácter de malta y el aroma a lúpulo como elemento destacado. A su vez, la IPA Americana es la base de múltiples variaciones, como la más fuerte Doble IPA y las llamadas IPA Especiales (Belga, Negra, Marrón, Roja, de Centeno y otras).

IPAs Argentinas

En nuestro país uno de los referentes indiscutidos en IPA es Hernan Castellani, creador de Sir Hopper, marca de cervezas “sólo IPA” nacida hace unos dos años. “Empecé con un concepto nuevo en el país pero bastante común afuera –cuenta Castellani–, que es el de cervecero nomade o gypsy brewer. Sin fábrica propia, elaboro por mi cuenta, alquilando las instalaciones de una fábrica amiga. Hoy estoy produciendo 3 mil litros mensuales, con 8 variedades de IPAs que rotan de a una, cada 15 días”.

Castellani dice que durante el último año la evolución del estilo en Argentina fue notoria. “Hace 4 o 5 años las IPAs eran malas, ásperas, sin aroma, con poco lúpulo, caramelosas y difíciles de tomar. Hoy se hacen muy buenas. No en todos los bares, claro, pero en Estados Unidos tampoco encontras buenas IPAs en todas las barras”.

Otro referente es Ricardo “Semilla” Aftyka, creador de la cerveza Juguetes Perdidos y socio en el bar Bélgica de Caballito. “La calidad de las IPAs argentinas cambió desde que se abrió la importación –cuenta–. Hace un año tenemos más variedad y calidad de lúpulos. El conocimiento de los cerveceros es bueno, porque a diferencia de lo que pasa en otros lugares acá todos fuimos antes homebrewers. Y la IPA es el estilo que más nos diferencia… imaginate que una cerveza industria estándar lleva medio gramo de lúpulo por litro y nuestra Imperial Red IPA lleva 25 gramos por litro”. ¡Unas 50 veces más!

“El chiste es que la gente se termine la copa –dice Aftyka en relación a los dos defectos típicos del estilo: el amargor extremo y la textura áspera–. El santo grial de la IPA es que soporte mucho lúpulo sin que raspe. Debe ser amarga pero no agresiva. El otro problema es el sabor vegetal o a clorofila, porque el lúpulo es una flor y si no se compensa bien lo arruina todo”.

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Federico Zanetti, de Cerveza Santina, dice que IPA es el estilo que la gente pide más. “Es una forma de rebelión contra las cervezas industriales con poco sabor, pensadas para beberlas heladas y en cantidad, sin percibir todo lo que tiene para ofrecernos.

Cada uno toma la cerveza como más le gusta, pero nosotros recomendamos unos grados más calientes, para que los aromas y sabores afloren y probar distintas gamas de la misma cerveza a medida que va cambiando la temperatura. A mi particularmente me gusta arrancar a unos 5 grados y terminar la copa cerca de los 14 grados, para apreciar todos esos cambios que aparecen cuando la cerveza se abre”.

Para tomar una pinta de IPA en alguno de los bares que mencionamos abajo necesitás invertir entre 70 y 150 pesos.

Pero, ¿cuáles probar? Estas son nuestras favoritas.

American IPA de Sir Hooper.

Alta intensidad de amargor y aroma en todos los perfiles de los lúpulos americanos, cítricos, frutados y resinosos, que con sus 7% de alcohol y 75 IBUs dan una cerveza intensa. Bajo el pulso firme de Castellani, tampoco dejes de probar la Imperial IPA, llevada todavía más al extremo, con 9% alcohol, 100 IBUs y toneladas de lúpulo para desafiar los límites del estilo sin perder balance y facilidad de paladar.

West Coast Rye IPA de Juguetes Perdidos.
Una de las cervezas que revolucionó el mundo craft en la década del 90. Levadura muy especial, granos de centeno y lupulado profundo. ¡Un viaje a California en una copa! Si quedás algo sediento, pedí una Imperial Red IPA, ganadora de una medalla en la última Copa Argentina de Cervezas. Una bomba con 8.5% de alcohol y 92 IBUs. Podría ser una American Barley Wine si no estuviera tan absurdamente lupulada. Nota: los bares que la sirven lo hacen en copas especiales para IPA proporcionadas por Juguetes Perdidos.
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Cryo Hops IPA de Itzel American.

Es el ícono de una cervecería prácticamente unipersonal comandada por Alberto Rodríguez, quien para fabricarla utiliza un tipo particular de lúpulo llamado Cryo Hops, cuyo material activo es extraído a bajas temperaturas para capturar mejor sus resinas y aceites aromáticos. Con 6,5% de alcohol, el truco está en que “nunca hago una igual a la otra –dice Rodríguez–, y sólo hago las que me gusta tomar a mí”. Cocina lotes particularmente chicos, así que si la encontrás disfrutala y sentite un privilegiado.


American IPA de 
Minga.

Con 7% de alcohol y amargor elevado (65 IBU) pero placentero. Frutas cítricas y tropicales como ananá, mango y maracuyá son algunos de los aromas que vas a encontrar. Esta cerveza tiene el estilo de Alexis Balzan, el brewmaster de Minga, quién suele hacer producciones colaborativas con Hernán Castellani de Sir Hooper. Minga es una de las fábricas que utiliza Castellani en su derrotero nómade y cervecero.

Rye American IPA de Santina.

Elaborada con centeno (rye) malteado. Predominan aromas de carácter a cereal y frutados (ananá, compota de durazno, peras), resinosos y especiados (pimienta, coriandro) por los lúpulos. En boca tiene cuerpo medio y levemente picante (por el centeno) que es muy agradable. De color dorada profunda, casi cobriza ofrece 6% alcohol, 60 IBUs. Entre todas las IPAs Federico Zanetti hace unos 1000 litros por mes. Actualmente está terminando su nueva fábrica, donde va a producir lotes de 1200 litros.

Güira

Bomber American IPA de Güira.

Medalla de Oro en la flamante Copa Argentina de Cervezas 2017. Con su 7% de alcohol y sus increíbles 70 IBUs, la Bomber IPA está hecha con una sutil combinación de los mejores lúpulos americanos. Es una cerveza bien aromática con notas a frutos tropicales y buen paladar.

IPA Inglesa de Vimana.

Más que todas las anteriores, esta cerveza pone en juego los aromas y sabores frutados aportados por la levadura inglesa, un amargor más pronunciado y la presencia de caramelos que le dan una sensación mayor de cuerpo. “Queremos que sea tomable, que tenga balance –dice Juan Pablo Pautasso, socio de Vimana–, y para lograrlo apuntamos a los valores inferiores de las características vitales del estilo”. Se fabrican sólo 900 litros por mes.

¿Dónde se consiguen?

CABA
Bélgica Bar (Caballito)
Bierlife (San Telmo)
Federal Cervecería Independiente (Palermo)
Desarmadero Bar (Palermo)
Cervecería Stammtisch (Saavedra)
Alvarez (Caballito)
Breoghan (San Telmo)
Brew Republic (Recoleta)
Bluedog (Palermo)
Hendrix (Devoto)
Drafter’s (Recoleta)
Hops (Palermo)
La Espuma de los Días (Palermo)
Pardo (Coghlan)
Gaboto (Villa Crespo)
Cornelius (Nuñez)

AMBA
Parador Antares (Vicente López)
Prinston (Ramos y Castelar)
El Granero de Finn (Castelar)
Finisterre Socialclub (Ituzaingó)
Cerveceria Brown (Adrogué)
Biergarten (Quilmes)
1870 Cervecería (Avellaneda)
BUЯZA Compañía Cervecera (Torcuato)
Lowell’s Biergarten (San Isidro)
Minta’s & Pura Birra Club (Acassuso)
Vasilly Zatec (San Isidro)
Cork Brewpub (Leloir)

La Plata
By Henry
Amsterdam

Mar del Plata
Cervecería Antares
La Paloma Brewing Company

Rosario
Birra
On Tap

Neuquen
Brauer Cervecería

Autor

  • Nico Falcioni

    Nicolás Falcioni es periodista y emprendedor. Escribió en las revistas del Club del Vino y RSVP, dirige Movilion.com (www.movilion.com) medio sobre servicios móviles. Y es socio en Coworc, agencia de comunicación (www.coworc.com).

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