En los últimos años el Cabernet Sauvignon, rey de tintos, comenzó a recuperar los muchos adeptos que perdió de la mano del Malbec mientras también convence a los paladares menos entrenados.
¿La razón?
Cada vez más los expertos que aseguran que los viñedos locales tienen atributos de sobra para dar vida a tintos de Cabernet Sauvignon de calidad internacional. Algo que parece pescar el consumidor, quizás como contrapartida de la malbequización del mercado. Y que ahora refrendan los números, ubicándolo como segundo en preferencia de consumo.
Elegimos diez Cabernet Sauvignon hasta $250 de Salta a Mendoza para renovar tu amor por este vino sin sacrificar lo que queda del aguinaldo.
Anotá:
Altos del Plata Cabernet Sauvignon (2014, $149).
Terrazas de los Andes siempre se lució con sus Cabernet y su etiqueta entry level no podría ser la excepción. Elaborado con uvas de Primera Zona y un sutil toque de roble resulta frutal, con bayas y frutos negros, además de especias. En boca es amplio y jugoso, con final medio.
Domaine Bousquet Cabernet Sauvignon (2015, $165).
Los viñedos de altura han transformado la expresión del Cabernet mendocino. Ya no se trata de tintos briosos casi masticables sino que el frío ayuda a lograr vinos frescos y vivaces. Así es este ejemplar, elaborado con uvas de Tupungato, que ofrece buen caudal frutal con tonos terrosos y paladar lineal.
Trivento Reserve Cabernet Sauvignon (2016, $166).
Combinando uvas de Luján de Cuyo y Valle de Uco Germán Di Césare elabora este varietal de expresión floral y frutal con nota de ciruelas y moras frescas, trazos balsámicos y toques certeros del roble. En boca es jugoso, expresivo y equilibrado, un combo que asegura un estilo sofisticado y moderno.
Altas Cumbres Cabernet Sauvignon (2016, $182).
Con esta cosecha la línea entry level de Lagarde estrena nueva imagen y carácter. Bendecido por una vendimia atípica, fresca y lluviosa, este Cabernet se presenta ligero con color rojo rubí de profundidad media mientras que en boca fluye envolvente y tenso. En nariz es expresivo con aromas nítidos de frutos rojos y negros frescos.
Andeluna 1300 Cabernet Sauvignon (2016, $190).
La escuela de los Cabernet frutales gana adeptos y entre ellos se encuentra Manuel González, winemaker de Andeluna. Elaborada con uvas de Tupungato, esta nueva cosecha recibe apenas 3 meses de contacto con roble, detalle que explica su perfil de frutos negros, pimiento y hierbas.
Lamadrid Single Vineyard Cabernet Sauvignon (2014, $190).
Agrelo es origen histórico de grandes Cabernet. Y en este ejemplar, se puede apreciar el perfil clásico de su nariz con buen caudal frutal en boca. Balance y prolijidad en cuanto a la crianza que aporta complejidad sin quitar protagonismo a la frutal. Un vino versátil para paladares demandantes de novedades.
Tomero Cabernet Sauvignon (2015, $195).
Esta línea de Bodega Vistalba se instaló como un nuevo clásico para bebedores modernos. Ofrece rica intensidad frutal, definición varietal y complejidad, un combo difícil de imaginar pero que, el enólogo Alejandro Canovas, sabe cómo lograr. Cassis, bayas maduras, especias y pimiento se aprecian en nariz pero también en medio de boca donde los taninos son redondos y el final largo.
Marchiori & Barraud Cabernet Sauvignon (2012, $210).
Los fundamentalistas del Cabernet saben que los enólogos Andrea Machiori y Luis Barraud tienen mano para elegir buenos viñedos de este varietal. En este caso las uvas provienen de Perdriel lo que define un perfil clásico, con buen paladar, y aromas de frutos rojos y negros maduros que se repiten en boca. Para fanáticos.
Paso de Piedra Cabernet Sauvignon (2011, $225).
Rodrigo Arizu maneja un antiguo viñedo familiar en Lulunta del que obtiene los frutos para este Cabernet de perfil alta gama pero de precio amigable. Es profundo, complejo y sobrio con buen caudal de especias y frutos negros maduros. Elegantón con buen potencial de guarda.
Fabre Montmayou Reserva (2015, $240).
Un clásico entre los Cabernet vernáculos desde mediados de los noventa. Fiel al estilo europeo cultivado por la bodega, la cosecha 2015 ofrece un perfil elegante con tonos de frutos negros, especias, dejos ahumados y pimienta. En boca es jugosos y con buen carga de sabor.
Piattelli Premium Reserve Salta (2014, $250).
Cafayate es una apuesta fija para los amantes de los Cabernet intensos. Con esta etiqueta, el enólogo Alejandro Nesman demuestra que también hay material para tintos sabrosos y redondos en los Valles Calchaquíes, un estilo que vale la pena descubrir y que este ejemplar es uno de los primeros en ofrecer.