Preparate para conocer una extrañeza gastronómica que puede cambiarte la vida. ¿Estás sentado? Acá vamos: hay gente que toma el helado de vainilla con aceite y sal. Sí, como si fuera una ensalada.
Las redes sociales se han superpoblado de videos y fotos de atrevidos que osan condimentar el postre por excelencia con un chorrito de aceite de oliva y unos granos de sal marina. Y aseguran que es un manjar.
Por supuesto que no faltan los detractores que responden a estas publicaciones con expresiones de indignación y conservadurismo gastronómico. Pero nosotros estamos listos para contarte todo y que vos decidas si estás afuera o adentro de esta tendencia estrambótica.
Bienvenidos al (he)lado oscuro
La mezcla apareció por primera vez en internet gracias a la cantante británica Dua Lipa, que mientras promocionaba el lanzamiento de su nuevo álbum, contó en una entrevista con la BBC Radio 1 sobre esta combinación.
“No me parece que el helado de chocolate sea tan bueno”, confesó la estrella pop y redobló la apuesta: “¿Sabés qué me encanta? Compro helado de vainilla y le pongo aceite de oliva y sal marina”.
Ante la sorprendida mirada del entrevistador, Dua insistió: “Se lo mostré a mucha gente y los traje al lado oscuro. Es muy bueno, tenés que probarlo”.
Rendido ante sus encantos, Greg James aceptó la propuesta: “Creo que todos deberíamos probarlo esta noche”.
Helado con sal y aceite, si lo dice Dua Lipa, hay que hacerlo
Las repercusiones no tardaron en llegar y las redes sociales se inundaron de videos de fans de todo el mundo probando esta combinación, la gran mayoría de ellos con reseñas positivas.
Un dato no menor es que muy pocos de estos videos se filmaron en Argentina, tierra de los mejores helados del mundo. Aunque -nobleza obliga- dos videos locales destacaron.
El primero es de Micaela Genovese, una joven chef argentina que comparte tips y recetas en su cuenta de Tik Tok.
Ella optó por comprar un cuarto de helado de Rapanui para probar esta combinación que, según dice, “está super viral en Tik Tok. Tenía que probarla”.
Mica no se quiso quedar solo con la versión de vainilla y para darle su propio toque pidió mitad de este clásico sabor con nueces pecán, y la otra mitad de chocolate 80%.
Su devolución: “Me gustó mucho más el de vainilla que el de chocolate como queda, pero está muy rico de todas formas”.
Más allá del alcance que Micaela tiene en sus redes sociales, donde cuenta con más de 160.000 seguidores, el video fue compartido por otros usuarios indignados y generó repercusiones de todo tipo.
Qué dicen los que saben
Se sumó también a esta tendencia Santiago Nieto, maestro heladero de Portho y ganador del premio al Mejor helado artesanal argentino en 2019.
Este especialista de los postres, y fundador de una de las heladerías más importantes de la provincia de San Juan, compartió un video donde se anima a probar “el helado viral”.
“Justamente, lo que ocasiona esta mezcla es que la sal realza el sabor de la vainilla y el aceite de oliva acompaña de una manera que envuelve todo el paladar, con una sensación fresca. Sobre todo, el aceite de oliva extra virgen”, dice después de saborear la primera cuchara.
Si bien la considera “una combinación perfecta”, Santiago va más allá y recomienda usar esta mezcla con Etiqueta Negra, un sabor propio de Portho, de chocolate amargo.
“En esta combinación en particular, el amargor del chocolate, la sal marina y el aceite de oliva, es un 10”, dice.
¿Listo para probarlo?
Si llegaste hasta acá, es porque esta combinación de dulce y salado por lo menos te despertó un poco de curiosidad. Y no vamos a cerrar la nota sin decirte cómo probarlo.
Por supuesto que la opción más sencilla es ir al freezer y agarrar ese cuarto de helado que quedó de la otra noche, meterle un chorrito de oliva y un poco de sal. O ir hasta la heladería predilecta del barrio y comprar un pote de vainilla.
Pero si el aceite de oliva es un bien de lujo y no tenés sal marina en la alacena, o simplemente preferís dejarle las artes culinarias a los que saben, tenemos buenas noticias.
Fico es un nuevo restaurante de Villa Crespo donde las fronteras entre lo dulce y lo salado se desdibujan. Fue fundado por Estefanía Maiorano y Martín Sclippa, que vienen de muchos años de trabajar con Narda Lepes.
Ahí vas a poder probar helado de hoja de higuera, que viene con una capa de higo, sésamo negro y aceite de oliva.
Otro profesional gastronómico que no quiso dejar fuera de su carta el aceite de oliva es Flavio Soppelsa, maestro heladero de Dante Soppelsa, un negocio familiar oriundo de Mendoza.
En la lista de sabores que ofrece esta heladería, destacando entre los clásicos, vas a encontrar el Dark Chocolate Olive, de chocolate amargo y oliva, y el Lemon Olive Oil, de limón.
Otras opciones
Quizás te interesa probar este mix de sabores, pero el helado no es tu postre favorito y acá en Vinomanos nunca te dejamos a pata.
En Féca, un café de especialidad del barrio porteño de Caballito, vas a encontrar un alfajor de mousse de chocolate y sal marina que no tiene nada que envidiarle al famoso marplatense.
Si preferís la zona de San Telmo o te gusta probar nuevos sabores mientras trabajás en el centro, Punto Café ofrece este invierno un cappuccino con dulce de coco especiado con anís y sal marina.
Por la zona de Palermo, Quma sabe lo que es bueno y decidió combinar limón y sal marina en unas galletitas que van perfectas con el café de la tarde.
Si el aceite de oliva te despierta más curiosidad que la sal, podés darle una chance a esta receta de bizcochuelo húmedo que seguro te va a acompañar muy bien en los mates.
Miles de curiosos de todo el mundo ya probaron dulces con sal marina y aceite de oliva, y se expresaron a favor de esta mezcla. Hacele caso a Dua, y animate a la experiencia.