Qué regalar, esa es la cuestión. Y el mercado ofrece múltiples alternativas para la gente a la que le gustan los vinos, cualesquiera que sean (los vinos y la gente). En esta nota, te mostramos los más curiosos regalos que podés comprar online o durante un viaje, con motivos super fundados o porque sí.
Copate con estos objetos
Podés elegir unas copas bonitas, con iniciales grabadas y boca ancha para mejor percepción de aromas y sabores. Pero también es posible recurrir a la complicidad mutua y elegir estas que tienen marcas para no pasarte de la raya. O para todo lo contrario.
Ahora, si la destinataria o el destinatario del obsequio es fan del orden, mariekondoneala a full con estas copas que son tipo mamushkas y alojan en su interior los accesorios, para que no terminen tirados por ahí.
¿Todavía te preguntás qué regalar? Seguí.
En caso de que ella o él sean fans del diseño nórdico, ¿qué mejor que unas copas para vino… de madera? Las produce a mano un fabricante de muebles de Colorado, EE.UU. con nogal negro lijado. Son un pelín más caras que las comunes pero resisten las mudanzas.
Ya sabemos que hay spas de vino. Pero si no te da el presupuesto para tanto, podés igual regalar un mimo temático: jabones artesanales con materia prima proveniente de viñedos (bueno, ok, más glicerina, aceites y perfumes). Son perfectos para obsequiar algo de vino a la gente abstemia.
Qué regalar a alguien muy foodie
Mermelada de Cabernet a la pimienta, de Chablis con romero y ajo, de borgoña anisado y varios sabores más, made in New England, EE.UU. No son las clásicas de frutilla o de durazno pero, con quesitos, valen el arrojo.
Supongamos ahora que querés regalar algo vinculado con el mundo del vino pero que la rompa de original. No pienses más: te sugerimos esta piedra enfriadora de mármol que, según su diseñador, es del mismo tipo con el que se construyó el Taj Mahal. Misterio, pero recién sacada del freezer te enfría cualquier copa de vino sin licuarla.
Si tu objetivo es recibir un “GRACIAS” así de grande, podés pensar en este set de cata que viene con una pizarra donde anotar lo que se va probando. Si no le llega a gustar, no dejan de ser cuatro vasitos útiles para lucir jazmines.
Para las y los que viven probando lo que pidió el vecino de mesa, la solución: nueve vinos en microdosis. Se entregan en sets que cambian todos los meses, a prueba de gente indecisa.
Otra opción para los cafeteros de alma pero que también aman los vinos: bolsitas con granos añejados en barricas de roble que alguna vez albergaron vino. Las preparan en Orange, Virginia.
Envuelto para regalo
¿Y si la destinataria o el obsequiado sirve medio a los ponchazos o cultiva la devoción por la limpieza? Esto les va a cerrar: un quitamanchas en spray, específico para eliminar restos de vino.
Si se tiene en mente alguien que de chico moría por los experimentos, se va a desmayar de la emoción cuando vea este kit para crear blends de espumosos rosados que sirve para ser wine maker de hasta cinco botellas.
Ahora bien, si la pregunta es qué regalar a alguien goloso, hay más respuestas. ¿Chupetines de Cabernet Sauvignon? Claro. Y de Chardonnay también. Para foodies curiosos.
Las y los que saben mucho de vinos tienen oportunidad de demostrarlo sin tomar nada con este juego de mesa que propone preguntas y respuestas para desafiar a amigos. Lo mismo pasa con este juego de cartas, que marida de manera exquisita con contenidos que también refieren a quesos.
De un lado, el mundo y sus dientes afilados. Del otro, el calor de una copa de vino. El felpudo es la frontera. Admitilo: mil veces más ingenioso que una botella que tal vez no le guste.
Y si querés algo infalible, también tenemos: medias, pero no de toalla como las que te regalaba tu abuela. ¡Estas no hay quien no las use! Son para wine lovers. 
Si se trata de alguien que es de botellas llevar, podés quedar bárbaro con este bolso/cartera de cuero especialmente pensado para que no se rompan los envases.
Aritos con juego de botella y copa, pines para la ropa, remeras que abren el abanico de posibilidades con la leyenda Wine not? y hasta seudo petacas vineras en formato pulsera son otras formas de agasajar con criterio amplio.
Una sugerencia más, en este caso para quienes se quejan de que cuesta descorchar algunas botellas (tienen razón). Pero como eso no lo podemos resolver, vamos por la solución alternativa: destapador eléctrico. Para alcanzar el éxito sin esfuerzo, como los que leyeron hasta acá y lograron inspirarse con un montón de ideas envueltas para regalo.
