Los seres humanos siempre hemos viajado por el mundo impulsados por los motivos más diversos: alegría, fe, amor, venganza, celebración, trabajo, soledad, vacaciones. Por qué no íbamos a viajar para tomar cerveza.
El vino y la gastronomía llevan años en buena relación con el turismo porque el sibaritismo es parte de todo buen viaje. De la misma manera, también ahora la cerveza artesanal emerge como un nuevo territorio para explorar con los sentidos y trazar nuestros propios itinerarios del gusto a través de una infinita diversidad de cervezas. De la mano de ella, se suman al mapa los hoteles cerveceros.
El origen de lo que ahora se ha transformado en turismo cervecero no es más que aficionados a la cerveza viajando por todo el mundo para visitar cervecerías y probar sus birras.
Los viajes a lugares de tradición cervecera como Bélgica, Alemania, Gran Bretaña, República Checa o Países Bajos son peregrinaciones habituales e históricas, porrón en mente. Y más cerca en el tiempo destinos como Noruega, Lituania y, sobre todo, Estados Unidos, se han convertido en mecas para los fans.
Desde hace por lo menos un par de décadas, la cantidad de nuevas cervecerías en el mundo se ha multiplicado a ritmo de locura. Y lo mismo pasa con los bebedores.
El crecimiento vertiginoso del mercado de la cerveza artesanal, en todos sus aspectos y diversidad, no tiene que ver con un boom o la moda: es un movimiento cultural vivo que se caracteriza por su dinamismo, creatividad e innovación.
Es raro encontrar ciudades que no tengan al menos una cervecería o donde no haya tres o cuatro cerveceros o cerveceras que se junten a cocinar su propia birra.
Y si bien el objetivo principal en los viajes cerveceros es beber y descubrir las mejores cervezas posibles, hay muchas otras razones que los impulsan: la participación en ferias, fiestas, festivales, eventos especiales, concursos, capacitaciones o visitar fábricas que cada vez son más atractivas y suman propuestas de gastronomía, entretenimiento, cultura y alojamiento.
Hoteles cerveceros
Los hoteles temáticos no son una novedad para la industria turística, y era cuestión de tiempo que la cerveza encontrase allí su lugar.
La cantidad de propuestas y de puestas en escena de los hoteles cerveceros es muy variada. Muchos de estos proyectos derivan de cadenas hoteleras, otros son independientes. Algunos son de lujo y otros más sencillos. Están los que ofrecen sólo habitaciones temáticas o un bar muy bien aprovisionado, y aquellos donde el alojamiento está integrado a la fábrica. Hay proyectos familiares y también surgidos de campañas de crowfounding.
Como sea, lo importante es que todos los hoteles cerveceros ofrecen muy buenas cervezas. Entre ellos, hicimos para vos una selección (arbitraria y sin ranking) que pretende invitarte a pensar en, tal vez, próximos destinos.
Holy Beer Hotel de Puerto Iguazú, Argentina
Único en su estilo en el país, este hotel surge de la alianza entre la cervecería Holy y el grupo hotelero TangoInn. Su ubicación privilegiada cerca de las Cataratas, una de las maravillas naturales del mundo, y de la Triple Frontera, lo convierten en un punto cosmopolita.
Holy Beer apunta a un público joven, especialmente extranjeros. Acepta mascotas y dispone de área de coworking. Ofrece un ambiente chill orientado al entretenimiento y la diversión, con un activo programa de fiestas y eventos culturales y gastronómicos. El área de asados y la piscina con chopera flotante son el corazón del hotel. La propuesta de la cocina es amplia, con foco en pizzas y hamburguesas que van muy bien con las 12 canillas de cerveza disponibles en el bar.
En cuanto a las habitaciones, ofrece dobles, triples y compartidas con modalidad hostel (co-living). El servicio de chopera a la habitación es muy popular. Además, la fábrica Holy organiza visitas guiadas, con catas, degustaciones y juegos.
Hotel Erdinger Weissbräu de Erding, Alemania.
Erding es una pequeña ciudad rural alemana de la región de Baviera, cerca de Munich. Allí se encuentra Erdinger, la cervecería más famosa del mundo especializada en cervezas de trigo refermentadas en botella. La Erdinger Weissbier es la más emblemática de las 11 de trigo que producen.
Como no querían quedarse afuera del mapa de hoteles cerveceros, en el predio de la fábrica, que tiene varios edificios históricos reconstruidos luego de la 2da Guerra Mundial, se encuentra también el Erdinger Weissbrau, un magnífico hotel con 33 habitaciones de 7 categorías, entre ellas la Suite Maestro Cervecero.
La visita a Erdinger es una experiencia integral, porque se puede recorrer la fábrica, realizar catas y degustaciones y disfrutar de la típica gastronomía bávara. Además, durante la primavera, se habilita un espectacular jardín cervecero.
Erdinger también es famosa por realizar eventos y festivales culturales a través de los que rescata la historia y la tradición cervecera de la región.
Hotel zur Malzmühle de Colonia, Alemania
Seguimos en Alemania, ahora en Colonia, una de las ciudades más grandes del país, ubicada al oeste, cerca de la triple frontera cervecera con Países Bajos y Bélgica. Aquí, en el centro del casco histórico de Colonia, se encuentra el Hotel zur Malzmühle, un establecimiento de 37 habitaciones inaugurado en 2015.
El principal atractivo para alojarse en el hotel (además de la carta de su restaurante de comida típica) es que pertenece a la cervecería Malzmühle, una fábrica familiar de 160 años que elabora una cerveza muy famosa: la Mühlen Kölsch.
Su estilo tiene denominación de origen y se elabora con la receta y técnicas originales del siglo XIX, bajo la estricta normativa de la Reinheitsgebot, la Ley de Pureza Alemana de 1516.
El hotel tiene 4 categorías de habitaciones. La exclusiva Brew Master Suite y las Deluxe y Superior cuentan con canillas de Mühlen Kölsch.
Pivní Hotel de Nepomuk, República Checa
Este hotel, inaugurado hace menos de tres años, es un proyecto de la cervecería Zlatá kráva. Ofrece 14 habitaciones, cada una con bar propio, cuyos nombres se corresponden con los 14 estilos de cerveza que elaboran. Pero su principal atractivo es el spa cervecero, con baños y tratamientos a base de levadura, lúpulo y cerveza.
Zlatá kravá significa vaca dorada en checo, y tanto la cervecería como el Pivní Hotel tienen un estilo rural de lujosa rusticidad donde predomina el cuero y la madera.
La familia propietaria de ambos establecimientos posee, además, una finca donde cría ganado para proveer a su cadena de restaurantes.
La cervecería, que se puede conocer con visitas y degustaciones programadas, ocupa el antiguo edificio de una maltería que funcionó en el siglo XIX. Tienen una programación permanente de eventos en los que combinan platos de su gastronomía con las cervezas de la casa.
Het Anker Hotel de Mechelen, Bélgica
El Het Anker Hotel es uno de los pioneros en su tipo y fue inaugurado en 1990. Se encuentra en el centro histórico de la ciudad junto a la cervecería histórica de la que forma parte y cuya tradición se remonta al siglo XV.
Elabora más de una docena de las clásicas cervezas Gouden Carolus. Desde la sala de desayuno se puede ver el interior de la fábrica. Se la recorre en visita guiada que permite probar las cervezas en la taberna.
La propuesta gastronómica incluye, entre una amplia y variada carta, un tradicional menú de tres pasos combinado con tres cervezas de la casa.
Brewdog hotels, USA y UK
El proyecto hotelero de la cervecería escocesa es, tal vez, el más conocido por los aficionados a la birra. En primer lugar, porque la cerveza de BrewDog es muy buena, se expandió rápidamente, pero sobre todo se hizo muy popular cuando liberó en wu web todas sus recetas experimentales, alrededor de 2000. Y, en segundo lugar, porque el proyecto de alojamiento se hizo a través de una campaña de crowfounding.
Así surgió, en 2018, The DogHouse, el primero de los hoteles cerveceros que se construyó fusionado con la fábrica de Brewdog en Columbus, Estados Unidos. Sus 32 habitaciones temáticas ofrecen una auténtica experiencia cervecera inmersiva. Luego vinieron los hoteles y hostels de Manchester, Edimburgo y Aberdeen.
Los establecimientos tienen muy pocas habitaciones y destacan por sus terrazas, jardines y bares donde se fomenta una movida cultural y gastronómica. Todas las habitaciones tienen canillas para tirar cerveza y heladeras con latas en el baño. Y son tan cool que, además, el huésped dispone de una guitarra eléctrica y de una colección de vinilos.
Por supuesto, los establecimientos son dog friendly.
Hotel Initial de Tainan, Taiwan
Este hotel es otro ejemplo de los establecimientos de cadena tematizados. Además de las habitaciones tuneadas y las amenities como jabones y shampoo a base de cerveza, el principal atractivo del Initial es su bar. Los huéspedes pueden encontrar gran variedad de cervezas locales y una infinidad de internacionales, de las más conocidas y las no tanto.
El Initial también destaca por la gastronomía, enfocada en la cocina local y regional, aunque también ofrece platos globales.
Como muchos hoteles de este tipo, tiene un amplio y variado programa de eventos culturales y es sede de festivales de música.
Malavencidad Beer Hotel de Ciudad de México, México
Ahora cambiamos de continente y de onda. El Malavencidad Beer Hotel está ubicado en el barrio Colonia Buenavista, en la periferia de la Ciudad de México. Su eslogan es “Hacer de la cerveza una experiencia memorable”, y detrás del proyecto están el grupo Inmense Hotels y la cervecería Primus.
El perfil que muestran es muy cool, mucha movida cultural y gastronómica, música y eventos diversos todo el tiempo. Hay degustaciones todos los fines de semana, habitaciones temáticas, amenities alusivos y venta de cerveza 24/7.
El hotel, de estilo art decó, está en un edificio reciclado, como todo el mobiliario. Tienen un manifiesto culinario sobre su propuesta de gastronomía mexicana extravagante y un reglamento del huésped que exige y obliga a beber cerveza permanentemente.
Malavecindad Beer Hotel también funciona como una comunidad multicultural y global. Se pueden contratar estadías largas, brindan espacios de coworking y, básicamente, un ambiente que apunta a divertirse, conocer gente de todos lados y tomar cerveza.
Treze Tílias Park Hotel, Brasil
Treze Tílias está emplazado en esa pequeña localidad homónima del estado de Santa Catarina, la región con mayor tradición cervecera de inspiración europea de Brasil. Se trata de un vistoso hotel de arquitectura de estilo austríaco que tiene su propia fábrica de cerveza: Linden Bier.
Los huéspedes tienen a disposición, tanto en el bar como en el restaurante, ocho estilos diferentes entre los que destacan variedades alemanas como Marzen, Heff Weiss, Winter Bock y Old Vienna.
Además de disfrutar de la gastronomía típica de inspiración europea en el vistoso brewpub, los que se hospeden en Treze Tílias pueden realizar visitas guiadas, participar de degustaciones y hasta hacer un curso de homebrewer y aprender conocimientos básicos para elaborar cerveza casera.
Como en otros hoteles cerveceros, en Treze Tílias también se pueden tomar baños de cerveza y disfrutar del Bierwagen, un espectáculo de danzas tradicionales de origen monárquico.
El hotel, además, es sede del WinterBierfest, el Festival Nacional de Cervezas de Invierno que se realiza cada año en el mes de julio, así que andá armando la valija.
