Dulce del leche

6 opciones para multiplicar el placer del dulce de leche

Clásico en alacenas y heladerías, presente en la tostada de la mañana, rey sobre una banana, en formato panqueque o directo de la cuchara, es un gran compañero cotidiano y a toda hora. Aquí, innovaciones para ratificar nuestro amor eterno y goloso.

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Todo el año no es carnaval, pero sí Día del dulce de leche. Bueno, ok, se celebra el 11 de octubre, pero no importa: para los argentinos, es un ingrediente de mil platos, y a la vez un postre en sí mismo porque, vamos, confesá: todos hemos cuchareado directamente del pote más de una vez.

En 2024, la producción nacional alcanzó unas 128.000 toneladas, con un consumo per cápita anual impactante, de 2,2 kilos. Y es un producto/vicio tan versátil que se renueva constantemente, tanto en materia de packaging como de la mano de grandes empresas y emprendimientos familiares que llevan varios años jugando con distintas versiones saborizadas. 

Desde opciones frutales hasta combinaciones con alcohol, como Malbec y fernet, el dulce de leche tiene mucho más para ofrecer de lo que creés.

Made in Córdoba: dulces y sabores que no fallan

Teentáte, con acento cordobés es un emprendimiento familiar que se destaca por su gran cantidad de opciones de dulce de leche saborizado. Tal como su nombre lo indica, es un proyecto que nace en la provincia mediterránea de la mano de Alberto Melo y su mujer, hace más de diez años. Con el paso del tiempo se fueron sumando también sus hijos.

Desde el vamos, su propuesta de dulce de leche es de primera calidad: no tiene glucosa ni conservantes artificiales. “Esto hace que nuestro Dulce de Leche Clásico se acerque a ese sabor original que tenía cuando se hacía en las casas”, destaca Alberto a Vinómanos.

Y a partir de esa base, nace una amplia propuesta de dulces de leche saborizados. Actualmente, cuentan con productos con ron, café, nuez, banana, naranja, coco, chocolate y chocolate con menta. Además, Melo destaca el dulce de leche con fernet, y cuenta que el año pasado lanzaron el dulce de leche con Malbec. Estos dos con bebidas, junto con el de chocolate con menta, son los más vendidos.

Cada nuevo sabor se testea de manera intensiva y se hacen los ajustes necesarios para no pasarse varios pueblos en esa búsqueda por ser original. 

Melo asegura que el público más exigente a la hora de probar un dulce de leche está en la exposición que se hace anualmente en la localidad bonaerense de Cañuelas: “Si pasa bien por ahí, Teentáte lo lanza al mercado con mucha seguridad”.

Además de en Córdoba, se puede conseguir dulce de leche Teentáte, con acento cordobés en distintos puntos de Buenos Aires, Santa Fe y Río Negro. Fijate acá.

San Ignacio, para servirte mejor

La empresa santafesina San Ignacio, con más de 85 años de trayectoria, es uno de los principales exportadores de dulce de leche de la Argentina y ya tiene consumidores en una veintena de países. En el mercado local, a su portfolio acaba de sumar una innovación: el práctico envase Squeeze.

Alejandro Reca, CEO y director de San Ignacio, precisó que este pote se ofrece en formato de 450 gramos, “para hacer más fácil el disfrute del dulce de leche en la vida cotidiana”.

De textura fluida y con el sabor clásico de siempre, el Squeeze es ideal para desayunos, meriendas y postres, ya que el envase dosificador permite aplicar el dulce de leche directamente sobre tostadas, frutas o panqueques. 

De Venezuela a Argentina, sin químicos

Frulatti nació en Villa María, Córdoba, en 2019, de la mano de Ruth, una mujer venezolana que cuando llegó a vivir a Argentina descubrió que era alérgica a los conservantes y colorantes que vienen en la mayoría de los productos industrializados.

Es por eso que decidió empezar a elaborar sus comidas desde cero, sin químicos. Su primer producto fue un yogur con frutas, que hizo con la intención de consumirlo en familia. Pero como le salieron unos cinco litros, decidió publicarlo en Market Place. 

“Me llovieron los pedidos. La gente buscaba productos naturales sin químicos. Ahí empezó todo. Ahí nació Frulatti”, recuerda.

Ruth aprovechó este puntapié y el comienzo de la cuarentena para capacitarse y escuchar las necesidades de su clientela. Así fue desarrollando nuevas variedades de productos, como dulce de leche y mermeladas. Siempre sin conservantes, con ingredientes de calidad, sin azúcar ni químicos.

Actualmente, en su página web podés encontrar yogures, dulces y mermeladas, postres, como flan sin lactosa; bebidas veganas, como kéfir y yogur a base de coco; ensaladas y quesos. 

Pero lo que más destaca son los dulces de leche artesanales y saborizados: de frutos rojos, con maní, de chocolate, con pasas de uva y con coco. Son 100% naturales y sin lactosa. 

Una exaltación de sabores en Buenos Aires

Milagros del Sol es otro emprendimiento familiar, pero esta vez de un pueblo de la provincia de Buenos Aires, Exaltación de la Cruz. Lleva 50 años de tradición y ya se ha instalado como una de las principales productoras de lácteos de la región, además de haber recibido varios premios. 

Por ejemplo, el año pasado lograron el segundo puesto en la exposición anual del dulce de leche de Cañuelas. Y la fábrica donde se elaboran sus productos, La Salamandra, ha sido reconocida con el premio de Oro en la feria Fancy Food Show de Nueva York.

Milagros del Sol es famosa por sus quesos y dulces de leche. Y recientemente lanzaron su propia línea de alfajores. “Creemos en los sabores auténticos, y por eso trabajamos con leche fresca de campo y métodos tradicionales”, afirman.

Ron, chocolate, menta, miel, banana, frutos rojos, naranja, café y Baileys son las opciones de dulces de leche saborizados que ofrecen actualmente. Según la variedad que elijas, vas a poder combinarla de distintas formas con tu comida. Por ejemplo, si te tienta probar el dulce de leche con menta, es una buena idea con algún postre. 

El de ron o el de Baileys pueden marcar el fin de la cena, y el de banana va directo de la cuchara, para sacarte el antojo dulce de la madrugada.

Desde su tienda online hacen envíos a todo el país y también podés encontrarlos en algunos locales en distintas partes del territorio nacional.

Vino y dulce de leche

Si hablamos de postres, hay un espacio gastronómico en Buenos Aires que tiene su propia oferta de dulce de leche saborizado. 

En Wino, un lugar donde el vino es protagonista y se ofrecen 120 etiquetas de diversas regiones del país, hay también un postre que acompaña el final de la cena con un equilibrio perfecto de sabores. 

Se trata del alfajor Koji, el hit de la casa: una versión helada y original, con tapas de cacao semi amargo y relleno de dulce de leche artesanal con miso y crema, frutos rojos patagónicos y cobertura de chocolate Fénix al 86%

Por último, La Serenísima se subió a la moda del sabor Dubai y presentó su dulce de leche con ese rótulo, con chocolate y gusto a pistacho. 

Autor

  • Vera Lauckner

    Licenciada en Comunicación Social de la UBA. Periodista de política, moda, tendencias y algo más. Co-fundadora del portal digital Miniteando. En su tiempo libre, teatro, cine y farándula. Prácticamente adicta al mate.

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