Descripción
En los últimos años, al menos para los entendidos, la vertiente de blancos empezó a arrojar vinos curioso y atractivos. Entre los primeros ejemplares en llamar la atención de la prensa especializada está este Riesling de Río Negro, lanzado en 2010 por Humberto Canale. Esta, su tercer vendimia, confirma lo que ya se intuía entonces. De aromática frutal que recuerda a duraznos, peras y limas, resulta atractivo a la nariz. Al paladar es donde hace toda la diferencia: de ataque seco y caudaloso, con volumen inusual para un blanco sin madera, ofrece una tirante y delicada frescura mineral. De largo sabor frutal, es un raro y rico vino en el panorama local.
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